martes, 21 de septiembre de 2010

Esta mañana.

Me tomas en tus brazos y soy flor que despierta, soy mirada.
Tus besos me saborean los contornos, mis fronteras, carretera interminable por mis caderas, mi cintura... las curvas de mis pechos parecen ser inventadas en ese momento, no antes, como si el antes fuera una ilusión... tengo la certeza de nacer justo ahora. Tu lengua me transforma los poros, me levanta vellos invisibles, riega el desierto inaudito. Dejo de ser carne y soy planta alimentada por el rocío, pradera, cielo, la heroína de mi historia, la afrodita de tus desvelos. Tus manos andan trincheras, campos de bombas terrestres ... un movimiento erróneo y volamos en mil pedazos... calmas mi susto con besos desesperados, besos de despedida , de última vez, cada vez y para siempre. Desentierras el poder dentro de mi y de pronto soy tierra que da vida, llevo en mí, cientos de caminos inexplorados; otros tomaron otra vía y sólo tú giraste al otro lado. Mis pechos son canela, manzana y de ellos te alimentas. Me arrastro hacia tí, soy tu esclava, convertida en musa, tu penetración me vuelve reina, amazona. Mi carne te esperaba, bajo la guardia e irrumpes en la fortaleza. Los espasmos me agitan el cuerpo y tiemblo bajo tu peso extasiada. Murmuras palabras nunca antes escuchadas, nunca antes susurradas a mis oídos, nunca antes, con esa fuerza, ese deseo. Abres el tesoro, subes la montaña imposible, las historias eran ciertas: Ahora soy otro ser, otro cuerpo, soy mujer en mí, cuatro elementos ... Cierro los ojos y me dejo vencer...
Despierto con el trote del corazón desbocado en mi garganta... Las lágrimas se asoman a ver qué pasa. Hoy podría decirte que he soñado contigo un sueño imposible, como suelen ser los sueños... Podría ...pero ¿para qué ? Esta larva no sabría qué hacer con alas de mariposa...